Pequeño gran regalo.

Ayer de plano fue un mal día, tras haber tenido un día complicado en el trabajo, y sufrir de un chistecito que me hizo mi carro, en la noche había que prepararse para ir a una fiesta, antes de eso decidí tomar un tiempo fuera y dormir un rato antes de irnos, decidí acostarme en el cuarto de la niña, que es un poco más tranquilo (claro, sin ella adentro), y me acosté, en eso Xóchitl quiso entrar a su cuarto pero su mamá le dijo que se esperaba porque estaba yo dormido.

Entro al cuarto de todas formas pero lo hizo caminando despacio,  alcance a escuchar sus pasos, yo me quedé con los ojos cerrados esperando a ver que hacía, cuando me vio acostado, pensó que estaba dormido yo creo, y muy a su manera me arropo para dormir mejor. Primero fue por algunos de sus muñecos de peluche para que me acompañaran, así que siguiendo su poco tierno estilo, de repente sentí que me caían varios muñecos en la cara, seguido de esto, fue por un pedazo de tela que le gusta usar como cobija y me lo puso en la cara también, y así, ya bien arropado que me tenía, (sepultado bajo muñecos de peluche y una manta), y  cuando pensaba que estaba por irse, le dio cuerda a un libro musical que tiene a un lado de su cama para ayudarme a dormir mejor, y ya con la misión cumplida de dormir a su papá, procedió a darme un beso, solo que como tenía la cara tapada, me lo dio en la mano, y salió a seguir jugando en otra parte.

Este pequeño regalo ha sido de los mejores que he recibido, me dejó con una gran sonrisa, espere a que se saliera bien del cuarto para destaparme un poco la cabeza de tanto mono, y con eso hizo que la frustración y cansancio que traía desapareciera, tuvo mejor efecto que haber dormido unas 10 horas seguidas, muchas gracias hijita.